Oscar

Estaba aburrida y el ícono en el celular brillaba.

Dos clicks y ya estábamos conversando.

Picasso! Te gusta Picasso. A mí también, sólo que es Porchia.

Juro le vi cara de Picasso.

“ Entra una nueva pena y las penas de la casa la reciben calladas, no muertas”.

Reí, reíste… ¿Cúando salimos? Dijiste.

Y yo tuve miedo. Espera- solo dije. Aún no es tiempo.

Largas charlas de tonterías después.

Risas, de la vida, del trabajo, lo que nos gusta.

Te vi con otros ojos, con otras gentes.

Picasso, Dalí, Indiana Jones, Breaking bad.

Risas, miradas profundas, caminas como dueño del mundo.

Buena Vista Social Club, ponle candela.

Renacer de remedios.

Me recordaste a la luna y a Leonora, a Wilde, a  Neruda y a Machado.

Por ti conocí a Gabriel Orozco y a las hamburguesas del Wicho.

Contigo aprendí que el atún sabe mejor con sal negra  de la India.

Me presentaste a Carminho y a Eddie Sharpe and the Magnetic Zeros…

Y me dieron ganas de tener confianza otra vez

De querer empezar, de intentarlo.

Pienso en ti, casi todos los días… En tu mirada lujuriosa,

en tus manos ansiosas.

Me haces pensar en lo que sería el futuro contigo,

Inventándote en situaciones imaginarias del día a día, del futuro, del pasado.

Sabor, sabor a canela en flor.

Un postre, comer rico, buena música y saborear una cerveza.

¿Cómo sería viajar contigo?

El futuro, el futuro lo siento tan presente, y tal vez nunca te vuelva a ver.