martes, noviembre 30, 2021

Miss iu

Hay días que parece que te haces presente, una palabra, una canción, y rondas mi cabeza todo el día.
A veces si siquiera es algo en concreto, es más bien una necesidad de pensar en ti, en que me hubieras dicho, aconsejado, quizás regañado o te hubieras reído conmigo. 

Pero no estás, y a veces ese dolor brota, entre las calles y las gentes.
Cuando camino por la ciudad. Todos los días te extraño.

Llevo tu nombre en mi nombre y así me acompañaras lo que me dure la vida.

jueves, noviembre 25, 2021

A

Amor, recuerdas? Tu piel en mi piel y tu cuerpo en mi cuerpo?  En ese momento te sentí tan mío. Y quería poseer tu alma y tu cuerpo,  tus días y tus noches.
Volver el tiempo eterno.

Te amé sin condiciones. Te di toda la libertad. Te hacía mío, me quería tuya. Soñaba una vida compartida, un futuro común hasta el final de nuestros días. Juntos por fin.

Quizás olvidaste que por mucho tiempo fui quién te motivaba a perseguir tu sueño, que creí en tí y te ayudé en lo que me permitiste participar de ese sueño que terminó separándonos.

Nuestro amor se evaporó, finalmente era de humo. Creí que esta vez nos saldría bien, y olvidé que estábamos destinados a no ser.

Se me olvidó que tus promesas son volátiles, como tu fidelidad. Seguramente otras mariposas cruzan en tu cielo raso y acompañan tus noches. Hoy dos años después todo está muerto. Tus huellas hace mucho se borraron de mi piel y tu olor ha desaparecido.

No sé puede amar sin contacto físico, hace falta la caricias, el beso recurrente. Quizás algunos de nuestros problemas se hubieran arreglado con un abrazo. Me quedé con un cajón con tus cosas, los besos las ilusiones y muchas sonrisas.

Aquí (otra vez) dejaste dolor. Y un amor añejado que enmohece. ¿Por qué no yo? ¿Porque no hay un nosotros? ¿Por que a mí me amaste menos? Nunca me sentí partícipe de tus decisiones y así no se puede tener vida en común.

Los hechos persisten más que las palabras, y aquí a fina de cuentas, no había  tanto amor. Te quedas en lo eterno. Aunque nunca más hable de ti y en mi corazón, aún alberga un poco de esperanza, esa que tarde o temprano también morirá. 

lunes, noviembre 15, 2021


Hubo una vez corazón. 
¿Hubo una vez corazón?
Hubo, una vez corazón. 
Hubo una vez, corazón.

sábado, noviembre 13, 2021

Quiero ser agua.

Los último días me visita una soledad devastadora. No quiero estar sola y tampoco quiero estar con nadie. Los días pasan como agua y procuro ocuparme. Pero duele, duele el pecho, duele el alma y el corazón. 

Duele no dicho, lo no vivido, el hijo que no nacerá, las vacaciones que no disfrutamos, la vida en común que no existirá. Los besos que nunca serán dados. El agua que correrá.
Duele el poco amor que había, la cobardía y el desinterés. El amor compartido con alguien más.

Duele las promesas no cumplidas y las que no existieron también. 

Duele donde ya no estas y dónde estabas, donde ya no estarás. Viviré y seguiré disfrutando  a la vida y las gentes. Volveré a besar y a amar a alguien especial. Pero siempre dolerá aquel que dijo amarme y solo fueron palabras al viento. Agua que corrió.

Antes, decían mis abuelas, las cosas se reparaban, no se desechaban. Aquí siempre sentí que este amor era temporal. Agua que fluye en un río sin fin, cambiando de corriente.

Yo quiero ser agua y ahogarme en el mar.